Tomás Pollak de Bootlog, Tugar y Prey

Tomás afirma que a pesar de ser siempre un cabeza cuadrada, terminó estudiando periodismo en la Universidad Católica de Chile. No fue una decisión fácil por sus múltiples intereses, incluyendo la Astronomía, pero cree que fue la mejor decisión:

Ya que la web no es más que un gran medio de comunicación. Obtuve mi título de Periodista luego de sacar el grado de Bachiller en Ciencias Sociales y Humanidades. Ah! también tengo un master en Headshots & Killing Sprees que obtuve luego de mi paso por Aardvark.

Hasta el momento Tomás comenta que no ha trabajado en un medio de comunicación tradicional y que se ha dedicado un 100% a la web:

Ya sea construyendo servicios o elaborando medios digitales. Felizmente hasta ahora no he tenido otro jefe que no sea yo.

En su último año de Universidad fundó su primera empresa, Aardvark Labs dedicada al desarrollo de aplicaciones web:

Trabajamos durante dos años con importantes clientes (como bancos y universidades) pero eventualmente llegó el día en que tomamos caminos distintos. Ahí fue que creé una segunda empresa llamada Reactor, que a diferencia de Aardvark tuvo en enfoque más comunicacional y menos técnico.

Pero aunque en ambas empresas pretendían desarrollar proyectos propios que dedicarse a los clientes, faltó financiamiento de tal forma que los clientes importaron más y quitaron tiempo para la creación propia:

Así que después de trabajar 3 años con clientes, eventualmente decidí tomar el toro por las astas y dedicarme exclusivamente a mis proyectos. Eso fue el 2008 justo después de volver de la Web 2.0 Expo en San Francisco donde tuve la oportunidad de conocer al maestro @cvander.

Tomás, tiene varios propósitos por el momento en relación a sus proyectos:

Mi propósito en este momento es empezar a exportar mis proyectos para afuera, a otros mercados más grandes. Además, me gustaría poder retomar mi ritmo de publicación en Bootlog. También volver a escribir en FayerWayer como en los viejos tiempos.

En la actualidad Tomás lanzó un libro sobre “Blogs: Medios tradicionales y nuevos medios en el Chile 2.0” en conjunto con otros periodistas que trabajan en áreas relacionadas a la web y reparte su tiempo entre sus cuatro exitosos proyectos:

Initt:

Es una página de inicio simple y rápida que te mantiene actualizado con lo que está pasando en el mundo y en tu vida digital minuto a minuto.

A diferencia de las otras no te exige crear una cuenta de usuario para poder customizarla como quieras y además se especializa en el contenido local como fuente de información (porque lo que más nos interesa leer es lo que pasa en nuestras tierras).

Initt, ofrece una serie de servicios como el acceso a tu correo, búsqueda en Google (y Maps), integración con Facebook, Flickr, Twitter y varias cosas más.

Tugar:

Es un agregador de propiedades en arriendo y venta sobre Google Maps. Una especie de mini-Google que permite buscar y filtrar casas o departamentos según el componente geográfico. Además suscribirse por RSS o mail para recibir notificaciones de nuevas incorporaciones al catálogo.

Ni yo me lo creo pero Tugar tiene el mérito de ser uno de los primeros servicios web construido como un mashup en base a Google Maps en Latinoamérica. Incluso hacerlo antes del día en que Google ofreciera una API de georreferencia en nuestro país. Tengo que decirlo, Tugar es uno de mis regalones.

Bootic:

Es un servicio hosteado para la creación de tiendas con pago en línea. Su misión es convertir un sitio web en un verdadero lugar de negocios. Además de las funciones de un CMS tradicional (publicar noticias, crear páginas y ordenar los menús), incluye de fábrica distintos métodos de pago para elegir, permite definir niveles de stock, costos de envío y obtener estadísticas de venta.

En resumen, más que un gestor de contenido, Bootic es un gestor de ventas en línea y lo bueno es que lo segundo lo elimina lo primero. Nació para darle una alternativa real a todos los desarrolladores que conocen las penurias del infierno que implica el construir canastos de compra en base a paquetes de software gratuitos… partiendo por nosotros!

Prey:

Es un software de rastreo que te ayuda a encontrar tu PC si algún día desaparece o te lo roban. Envía reportes con detallada información sobre el estado y la ubicación del aparato, incluyendo un pantallazo del escritorio e incluso una foto del impostor (en caso de que tenga webcam) para que puedas pueda dar con su paradero.

Corre en Mac, Linux y Windows y al ser el único proyecto no 100% web decidí liberarlo bajo la GPLv3, aportando así un granito de arena al mundo del código abierto. Y lo mejor es que funciona: a sólo semanas de anunciar el proyecto lanzamos una segunda versión del software, con soporte para Windows e incluso instaladores gráficos. Hoy en el equipo somos más de 10 personas y creciendo firme.

A nivel de Backend Tomás escribe en PHP o Ruby sobre librerías como Codeigniter, Cake, Rails y Sinatra. A nivel de interfaz utiliza Mootools o Jquery en Javascript dependiendo de la complejidad del sitio:

Siempre me preocupo (aunque quizás demasiado) de que las páginas pesen ojalá menos de un gramo. Creo que mi fuerte está más en la creación de interfaces, aunque con el correr de los años he aprendido más sobre código “duro” y eso me ha servido muchísimo. Además uso Linux hace un buen tiempo entonces se me ha hecho relativamente fácil configurar y mantener servidores.

Su acercamiento a las herramientas está relacionado con la curiosidad y necesidad. Trata de ser autosuficiente para sus proyectos de tal forma que cuando se le ocurre una idea trata de visualizar las herramientas que necesita para llevala a cabo:

Si hay algo que haga falta, bueno, san Google, santa Wikipedia y san se acabó. Si hay algo en que Internet cambia las cosas es justamente en éso, que puedes aprender lo que quieras si te das el tiempo.

Considera que su curiosidad ha sido útil en su aprendizaje, porque si bien no se considera experto en nada, sabe de todo un poco lo que le ha permitido desarrollar un proyecto:

Desde las fases más iniciales hasta la implementación final sin depender de un tercero (y de hecho, ése ha sido el caso con la mayoría de mis guaguas). Afortunadamente están las librerías de software para darme una mano en el camino!

¿Por qué el código abierto sí funciona?

Porque dos cabezas piensan mejor que una, y cuatro manos hacen más que dos.

Para Tomás, sus proyectos tienen un objetivo claro:

Hacer lo que me entretiene. Si programo Tugares, Preys me dedico horas y horas a corregir y mejorar detalles es tan solo porque lo paso bien haciéndolo. Si de paso puedo vivir de ellos, cuánto mejor. Ahora, también creo mis proyectos se diferencian en gran medida en que responden a necesidades concretas de la vida cotidiana. Ideas que surgen de problemas del mundo real.

Además de su pasión por el desarrollo web Tomás confiesa ser amante de la música y composición de la misma:

De hecho la razón de por qué cree Bootlog no tuvo nada que ver con tecnología sino simplemente con que quería poner en línea mi primer disco para que no quedara acumulando polvo en un cajón. ¡Y no es broma!

También, le gusta escribir y experimentar con el texto:

Suelo experimentar mucho en mi blog inventando historias, creando personajes, metiéndoles harto suspenso y pimienta. Creo que ayudan a hacer más entretenida la lectura, y eso se agradece mucho cuando se trata de temas técnicos (Linux, código abierto, servicios web), especialmente el usuario no tan avanzado que es el público al que intento llegar.

Para los amantes del diseño, desarrollo web y las tendencias en este medio, Tomás aconseja tres acciones fundamentales que él ha puesto en práctica:

Mientras más pronto se tiren a la piscina, mejor. En la medida en que pase el tiempo van a tener más responsabilidades y siempre será más difícil. Lo segundo es que nunca se pongan límites por tonteras: en Internet está todo el conocimiento para hacer absolutamente lo que quieras.Y lo tercero es que si están pensando que tienen la idea para hacerse millonarios de un día a otro, difícilmente les va a resultar. Claro, a menos de que la idea sea comprar el boleto ganador de la lotería!

Tomás opina que dentrás de un proyecto no puede existir el único interés por hacer dinero:

Debe haber un espíritu por mejorar algo, por resolver un problema al que nadie aún le ha dado buena solución. Yo creo que todos los productos, empresas y proyectos deben tener un alma porque es éso lo que lleva a los usuarios a creer en ellos, a quieran colaborar, recomendarlos a sus amigos, en fin. Es decir, un proyecto puede ser muy rentable pero para mí no tiene sustento si no tiene una esencia detrás. Y si no tiene una esencia, bueno, entonces simplemente no tiene sentido.

Está convencido de que las ideas no aparecen “sentándose a pensar”. Más bien emergen en base a necesidades concretas que van apareciendo:

Que en mi caso se dio la posibilidad de que tuve las herramientas para darles solución. De esto se desprenden dos cosas: que por lo general las buenas ideas no son ideas “nuevas” (sino simplemente mejores soluciones), y que una idea que se queda en el tintero vale prácticamente cero.

Para eso le gustaría citar al propio Torvalds:

Edison dijo: “1% de inspiración, 99% de transpiración”. Pudo haber sido cierto un siglo atrás y la inspiración es la parte fácil.

Tomás ha tenido reconocimiento por sus proyectos, aunque confiesa que es Prey el centro de atención en vista de la tremenda cobertura mediática que ha tenido en Chile, Ecuador, Venezuela, Colombia, México, Brasil, España e Italia:

¡Ahora espero que Bootic corra la misma suerte! pero me hacen mucho más feliz los comentarios y correos que recibo que las menciones en la prensa o cualquier galardón. No hay nada mejor que leer las palabras de un usuario emocionado con tu servicio porque le solucionaste el día. De alguien del medio a quien admiras aplaudiendo tu trabajo, del pequeño programador de 13 años que te comenta que cuando grande quiere ser como tú. ¡No hay nada que se le compare!

Foto de Tomás Pollak tomada de la galería de Lukas_y2k. Perfil creado mientras escuchaba Viva la vida de Cold Play.