Según la Wikipedia, un torrente (torrent) puede referirse tanto a un archivo .torrent de metadatos o a todos los archivos que se describen en él. Estos archivos se comparten gracias al protocolo BitTorrent, nombre que también designa al cliente oficial para descargarlos, aunque existen muchos otros.

Para una introducción al protocolo, clientes de descarga y buscadores de torrentes recomendamos el artículo de Marcelo Zamora “BitTorrent: ¿P2P (Peer to Peer) o FTP?”. Aquí trataremos simplemente de ampliar algunos aspectos que ya se han tratado en dicha nota.

Clientes de descarga

En el artículo mencionado se listan varios clientes con los que descargar archivos .torrent, a los que podemos añadir BitTyrant, basado en Azureus y que se centra específicamente en obtener el máximo rendimiento.

Para conseguirlo, su método de actuación difiere un tanto de los clientes BitTorrent habituales, “premiando” en cierto modo a algunos usuarios tal y como ocurre en otros programas P2P, de ahí que a algunos les funcione con la rapidez del rayo y a otros les resulte bastante lento.

Lo mencionamos por si a alguien le puede resultar de utilidad. Si funcionas con Mac OS X, puede que te interese Transmission, un cliente BitTorrent desarrollado para ese sistema operativo.

Y recordemos que el navegador Opera a partir de su versión 8 dispone de un cliente BitTorrent integrado, de manera que se pueden descargar torrentes directamente con su gestor de descargas como si fuese cualquier otro archivo.

¿Cuál es el mejor? Como siempre, depende de nuestro uso o necesidades. En la Wikipedia se muestra una comparativa de clientes BitTorrent como orientación. En varios sitios de Internet podemos encontrar consejos acerca de cómo acelerar las descargas.

Toque personal

Si no nos satisface el aspecto estético de algunos de los clientes BitTorrent, o de los iconos para tipos de archivo o de programa que producen, podemos darles cierto toque personal gracias al trabajo de Iconaholic, donde podemos encontrar iconos para Transmission, BitTorrent y µTorrent , así como un tema completo para este último (a propósito, se pronuncia “mu torrent”).

Atención: los iconos y temas de Iconaholic son "únicamente" para uso personal; si deseas utilizarlos en páginas web o programas habrás de pagar su licencia. Pueden encontrarse más temas de otros autores para esta aplicación en µTorrent Skins.

Hacer archivos .torrent

Si somos generosos y queremos hacer torrentes de nuestros archivos y así compartirlos, podemos encontrar una función para conseguirlo en muchos clientes de descarga, pero en ocasiones, como es el caso de Azureus, sólo se podrán descargar con las aplicaciones en las que se crearon.

En cualquier caso, para evitar esa clase de problemas contamos con la ayuda de programas como Make Torrent (BioXD ha escrito un tutorial en español para este programa) o widgets para Mac como CreateTorrent.

Buscar y encontrar

Existen varios sitios especializados en búsqueda de archivos .torrent, como se explica en el artículo de Marcelo Zamora. Pero el todopoderoso Google también puede ayudarnos: no hay más que introducir en el campo de búsqueda: ‘nombre del archivo que buscamos ext:torrent’ y es posible que lo encontremos.

Además de los buscadores y metabuscadores de archivos .torrent que se mencionan en el artículo, son dignos de mención el propio buscador de BitTorrent, aunque haya que “alquilar” las descargas; Fenopy, que posee una atractiva interfaz muy Web 2.0.

TorrentReactor, con un motor de búsqueda muy bueno, aunque su servidor tiene cierta tendencia a “caerse”. Y no podemos cerrar la lista sin habar de Snarf-If, que aunque también contenga archivos de tipo variado, se ha especializado en esos temas que van más allá de lo erótico.

Lo cierto es que hay literalmente cientos de sitios sobre torrentes, pero si nos liamos con tanto buscador, podemos tener a mano la mayoría de los más conocidos en un sólo portal: ShockTorrent.

Si somos vagos incluso para ShockTorrent, tenemos una extensión de Firefox que nos ayudará de forma aún más cómoda con las búsquedas de archivos .torrent directamente desde el navegador: TorrentBar, que además incluye enlaces a sitios relacionados con las redes P2P.

Por otra parte, hasta los torrents tienen su propio promotor social: Torrop es un sitio donde los usuarios votan los archivos .torrent de mejor calidad, de modo que podemos estar seguros en cierta medida de su autenticidad (recordemos la cantidad de archivos que no se corresponden con su nombre en las redes P2P).

Legalidad

Como vemos, descargar y compartir archivos sigue siendo una de las principales funciones de Internet, y el protocolo BitTorrent ha ayudado a dar un paso más en ese aspecto.

La descarga por medio de este método no tiene por qué asociarse a “ilegalidad”. En España al menos, no es ilegal el simple hecho de descargar archivos. Por otra parte, no hace mucho, BitTorrent inauguraba su tienda en línea para descargas legales. No obstante, conviene recordar que en general las descargas solamente pueden hacerse para uso personal, sin ánimo de lucro.

Además, siempre y cuando nos guste algo que descarguemos, deberíamos comprar el original si está disponible para apoyar así a sus autores e impulsar la creación.